Calendario de adviento 25 - FALLSTRUKTUR
Veinticinco de treinta.
¡Explosiones! ¡Muerte! ¡Drogas! En el juego de hoy no hay absolutamente nada de eso. Bueno, quizás algo de lo último, que es Navidad. Pero para mí solo es un día más en el que celebrar nuestro calendario de adviento. Y me pongo en esta tesitura: te has levantado tarde, tienes algo de resaca, tal vez estás cansadx. ¿Por qué no un reto familiar de esos de a ver quien aguanta sin caerse? Quiero decir, ¿te acuerdas de los onlyup, los juegos de solo subir pa’rriba? Pues esto es un onlydown. Y lo escribe una firma invitada, la mejor posible, alguien que sabe mucho sobre eso del fall, el drop y, sobre todo, del dawn. Perdón. Pasen y lean a mi admirado y amigo Johnny Prat:
Si te gustan los videojuegos indie conoces a Stuffed Wombat. O, al menos, te suena. En caso de que no sea así, no te preocupes, porque lo vas a acabar conociendo. Y te va a encantar. Lo único malo, que yo sepa, es que no es un marsupial empachado. Josh Hollendonner, su nombre. Y Viena, última residencia conocida. Por mí, al menos. Y su obra, tan ecléctica como prolífica. Su interés se enfoca en la experimentación, las mecánicas y el game feel. Que de gustico al jugarlo. Como él mismo dice, hace juegos, pero también piensa sobre ellos. En su web podréis encontrar enlaces tanto del lado creativo como del pensativo. Creo que lo primero suyo que jugué fue ‘Always Down’, incluido en la antología de juegos 10mg. Un puñado de pildoritas que duran escasos diez minutos cada una. Fresco como un paquete de Halls negro. Luego vinieron ‘qomp’, ‘Producer’ (2021) o ‘Mosa Lina’ si hablamos de los más famosos. Antes, durante y después, un porrón de prototipos, minijuegos, experimentos y artefactos. Un culo inquieto, vamos.
Para el caso que nos ocupa, la recomendación de mi querido Isra para este calendario de adviento número 25, lo hizo acompañado. Junto con Fynn Levy —del cual podéis jugar ‘The Bad Zone’ en su página de itch y experimentar por una vez un videojuego hecho para joder de verdad— y Rollin’Barrel —suyo os recomiendo ‘00000010’ para contrastar el anterior con algo sensorial para relajar la frustración— construyeron este ‘FALLSTRUKTUR’, un juego sobre caer de pie. Fue lanzado en agosto de este año pero conceptualizado por primera vez a principios del mismo, lo que supone un ciclo de desarrollo perfecto e idílico si uno quisiese encontrar la fórmula de la CocaCola de la sostenibilidad indie. Con la salvedad de que es gratuito, claro está.
En una época donde los juegos de subir sin parar están de moda gracias a escandalosos que deciden jugarlos en streaming, aquí hemos venido a dejarnos vencer por la gravedad. Descender a través de un mundo onírico de geometrías imposibles y retorcidas hasta tocar fondo nunca fue tan satisfactorio. Tampoco tan punitivo. Caer es caer, siempre duele, y algunos moratones los llevamos de por vida, aunque hace tiempo que curase el hematoma. Pero esta vez, al contrario que en la vida, caemos porque queremos. Y eso nos da control sobre nuestros propios hostiazos.
Basado en físicas exageradas y resbaladizas, se trata de medir bien, pero prever aún mejor. Usar cada superficie como apoyo, pero también como fuente de fricción que amortigüe nuestra caída para poder seguir bajando, cada vez un poquico más rápido. Ahora, aquí, en esta tierra extraña, neblinosa y desconocida, todos somos speedrunners —el récord mundial está en poco más de 37 segundos—. Y gracias a que sus creadores hicieron el juego accesible a herramientas para modificarlo, tiene toda una comunidad creando mapas y trasteando con sus entrañas como una caja de bloques de colores. Animaos y dejaos caer sin nadie debajo para que os sujete. Es la mejor sensación del mundo, si no mueres aplastado por tu propio peso.
Enlace para descargar: https://store.steampowered.com/app/3674270/FALLSTRUKTUR/




Lo mejor es que Josh es tan majo que seguro que se llevaría genial con vosotros dos.